Inteligencia emocional: el impacto de las emociones en el trabajo

dos mujeres en el trabajo ofuscadas por no controlar sus emociones

La inteligencia emocional es más importante que el coeficiente intelectual en el 90% de las situaciones laborales. – Daniel Goleman.

El tiempo aproximado de lectura de este artículo es de 7 minutos.

A pesar de ser un tema tabú, cada vez se tiene más en cuenta la inteligencia emocional en el entorno laboral. Más allá de las habilidades técnicas y el conocimiento específico de cada área, la capacidad para gestionar las emociones propias y las de los demás marca una diferencia significativa en el rendimiento y el desarrollo profesional. 

¿Qué es la inteligencia emocional?

La inteligencia emocional se define como la capacidad de reconocer, comprender y gestionar nuestras propias emociones, así como de influir en las emociones de los demás. Este concepto fue popularizado por el psicólogo Daniel Goleman y se divide en cinco componentes esenciales: autoconciencia, autorregulación, motivación, empatía y habilidades sociales.

Los 5 componentes de la inteligencia emocional

  1. Autoconciencia: es la capacidad de reconocer y entender nuestras propias emociones y cómo estas afectan a nuestro comportamiento y decisiones.
  2. Autorregulación: consiste en manejar nuestras emociones de manera saludable y productiva, manteniendo el control y adaptándonos a las circunstancias cambiantes.
  3. Motivación: se refiere a la pasión por el trabajo y la persistencia para alcanzar metas, impulsados por razones internas más allá de recompensas externas.
  4. Empatía: es la habilidad de entender y compartir los sentimientos de los demás, facilitando relaciones y comunicación afectivas.
  5. Habilidades sociales: involucran la capacidad para gestionar relaciones, construir redes y navegar en ambientes sociales con efectividad.

Cómo la inteligencia emocional ayuda en el trabajo

En el entorno del coworking, la IE te permite:

  • Construir relaciones sólidas con tus compañeros: la empatía te ayuda a comprender las perspectivas de los demás, fomentar la colaboración y crear un ambiente de confianza.
  • Comunicarte de manera efectiva: la comunicación asertiva te permite expresar tus ideas con claridad, escuchar activamente y resolver conflictos de manera constructiva.
  • Liderar con inspiración: la capacidad de motivar e inspirar a tu equipo te permite alcanzar objetivos comunes y crear un ambiente de trabajo positivo.
  • Adaptarte a los cambios: la flexibilidad emocional te permite afrontar los retos y cambios con mayor resiliencia, manteniendo una actitud positiva y proactiva.

Desarrollo profesional en Madrid: aprovecha los cursos gratuitos para mejorar tus habilidades blandas

Beneficios de un alto coeficiente emocional

  • Mejora de la comunicación: las personas emocionalmente inteligentes son mejores comunicadores, lo que reduce malentendidos y conflictos.
  • Mayor capacidad de liderazgo: los líderes con alta IE inspiran y motivan a sus equipos, fomentando un ambiente de trabajo positivo y productivo.
  • Reducción del estrés: al manejar mejor las emociones, los individuos pueden reducir el estrés, lo que mejora la salud mental y física.
  • Resolución de conflictos: la empatía y las habilidades sociales permiten resolver conflictos de manera efectiva y constructiva.
  • Mayor adaptabilidad: la autorregulación y la autoconciencia ayudan a adaptarse a cambios y desafíos de manera más eficiente.

Estrategias para desarrollar la inteligencia emocional

Desarrollar la inteligencia emocional es un proceso continuo que requiere práctica y dedicación. Aquí te presentamos siete maneras efectivas de mejorar tu IE en el lugar de trabajo:

  1. Practica la autoconciencia: dedica tiempo a reflexionar sobre tus emociones y cómo influyen en tus pensamientos y acciones. Mantén un diario emocional para identificar patrones y desencadenantes.
  2. Gestiona tu estrés: desarrolla técnicas de manejo del estrés, como la meditación, la respiración profunda o el ejercicio regular, para mantener la calma bajo presión.
  3. Fomenta la empatía: intenta ver las situaciones desde la perspectiva de los demás. Escucha activamente y muestra interés genuino por las preocupaciones y sentimientos de tus compañeros.
  4. Desarrolla tus habilidades sociales: participa en actividades de equipo y redes profesionales para mejorar tu capacidad de relación y comunicación.
  5. Establece metas personales y profesionales: define claramente tus objetivos y trabaja hacia ellos con perseverancia, manteniendo la motivación interna.
  6. Pide retroalimentación: solicita opiniones de colegas y supervisores sobre tu desempeño emocional y toma en cuenta sus sugerencias para mejorar.
  7. Practica la autorregulación: desarrolla la habilidad de manejar tus emociones en el momento, aprendiendo a tomar un respiro antes de reaccionar y enfocándose en respuestas constructivas.

 

Te puede interesar: 

Psychology Today

Greater Good Magazine

Test gratuito de inteligencia emocional de MindTools

Autora María Moreno.

Deja un comentario